Nuestro cuerpo y mente sufre una serie de cambios a medida que vamos envejeciendo.
Uno de ellos son los cambios de ánimos y la irritabilidad, los cuales pueden ser causado por varios motivos:
- Mientras vamos envejeciendo, el cuerpo produce menos hormonas, lo que puede provocar cambios de humor. En las personas mayores los cambios son más comunes debido a los dolores crónicos que pueden llegar a experimentar.
- Los cambios emocionales debido a la jubilación, la pérdida de amigos o familiares, además de otros cambios durante la vejez, son motivos para causar estrés y ansiedad, lo que influye en los cambios de humor.
- Las personas mayores al sufrir deterioro cognitivo pueden tener dificultades en la regulación de sus emociones.
Si tiene algún ser querido que esté experimentando cambios de humor o irritabilidad, podemos ayudarles a controlar esos síntomas.
- Si los cambios de humor e irritabilidad interfieren en su estilo de vida, es hora de buscar ayuda profesional. Un médico puede atender el caso y descartar las causas médicas que estén afectando, además un terapeuta se encargará de ayudar a estrategias para afrontar la situación.
- Realizar ejercicios constantemente tiene grandes beneficios para nuestro cuerpo, tanto física como mentalmente, ayudando a mejorar el estado de ánimo, reducir el estrés y mejorar la calidad de sueño.
- Mantener una dieta saludable puede ayudar a mejorar el estado de ánimo y los niveles de energía. Así es que es importante comer muchas fruta, verduras y granos enteros.
- Si dormimos lo suficiente nuestro cuerpo lo agradecerá, ya que es esencial para la salud física y mental, debemos tratar de dormir de 7 a 8 horas cada noche.
- El aislamiento social no es recomendable, tratar de mantener una vida sociable y activa mejora el estado de ánimo.
- Las técnicas de relajación también son recomendables, a través del yoga, la meditación y la respiración profunda ayuda significativamente a mejorar el estrés y el estado de ánimo.